Tipos y características a tener en cuenta de las heces de conejos

Las heces, tanto en las personas como en los animales, nos proporcionan señales claras y contundentes de la existencia de posibles enfermedades que pueden ir desde una infección intestinal hasta un cáncer de colon; pero también de fisuras, hemorroides y otras afecciones, como el intestino irritable, entre otras. Por supuesto, la mejor forma de averiguarlo es mediante los análisis clínicos, aunque el color y la consistencia de las heces suelen ser las primeras señales que nos indican que algo está ocurriendo. Por supuesto, ocurre lo mismo con la caca de los conejos. Observándola sabremos si nuestro amigo peludito está bien o tal vez necesita visitar a un veterinario. A continuación, te explicamos todo lo que debes saber.

Caca de conejos sanos: ¿Cómo es?

Los conejos son animales que se alimentan principalmente de fibra, es por este motivo por el cual sus heces suelen ser bastante compactas, secas y contundentes. Aunque, su aspecto puede variar dependiendo de varias cuestiones —y no por ello significa que tu mascota esté enferma—. Estos son los diferentes tipos de heces que puedes detectar:

• Caca de conejo normal: Un conejo sano suele defecar bolitas redondas —generalmente de pequeño tamaño, aunque uniformes— y de color oscuro. Estas no huelen ni manchan, además al aplastarlas tienen un aspecto similar a heno prensado.
• Cecotrofos: Los cecotrofos son heces blandas de doble digestión, es decir, heces que el conejo ingiere directamente del ano y tras su segunda digestión tienen un aspecto diferente a las anteriores. Estas heces blandas de conejos que se forman en el ciego y sí, aunque parezca extraño, es algo habitual. Ahora bien, si notas un cambio en la conducta de tu mascota, por ejemplo que lo haga con mayor frecuencia de lo habitual, entonces puede ser una señal de que algo está fallando.
• Caca de conejo con pelo: Suele ser muy habitual durante la época de muda, así que no te asustes. Las bolitas, en este caso, suelen aparecer unidas unas a otras por los pelos. Su intestino, afortunadamente, funciona bien. No obstante, es aconsejable que lo cepilles para que deje de ingerir pelo y que ello pueda provocarle un taponamiento.
• Heces blandas en conejos: Por lo general, suele ser una señal de que algo está fallando, ahora bien, no siempre es así. Es importante que identifiques si se trata de diarrea o si, por el contrario, es un cecotrofo o, incluso, si tu peludín ha hecho pipí encima de la caca. En estos casos, como es de esperar, la caca se reblandecerá.
• Heces blancas: Por la misma razón que comentábamos en el punto anterior, el conejo puede haber hecho pipí encima de su caca. Esto puede ocasionar, por otro lado, que se vuelva blanca a causa del calcio. No es algo que tenga mayor importancia, aunque si se repite durante mucho tiempo es posible que tenga un exceso de calcio —a veces, por consumir demasiada alfalfa—. Si no sabes detectarlo, contacta con tu veterinario.

Caca de conejos: enfermedades

Tal y como explicábamos en la introducción, las heces sirven para ayudarnos a identificar si tu mascota puede estar sufriendo algún problema. Hay síntomas claros que nos permiten saberlo, como por ejemplo, que sean más pequeñas de lo normal, que estén muy duras o, por el contrario, que presenten diarrea. Ahora bien, como indicábamos más arriba que las cacas de mi conejo huelan mal no es un problema como tal, puesto que puede tratarse de cecotrofia. En cualquier caso, en este apartado podemos hacer también una distinción para ayudarte a identificarlas:

• Heces con moco en conejos: Al hablar del conejo, heces, mucosas y tipos de cacas, nos encontramos ante uno de los signos más representativos de que tu mascota puede tener algún problema digestivo o cualquier otra enfermedad. Generalmente, las cacas con moco de conejos significan que tu mascota ha pasado por una etapa de estasis (parada intestinal) y esto puede deberse a una alteración de la flora intestinal o estar causado por parásitos. Es importante que visites a tu veterinario de confianza cuanto antes.
• Cacas dobles: En estos casos las cacas aparecen muy juntas, como si fueran siamesas. Ello puede deberse a que la digestión de tu conejo ha sido más lenta de lo normal, pero también por un episodio de estrés o por su edad avanzada.
• Cacas grandes y estiradas: Cuando las cacas de conejos son más grandes de lo normal —y generalmente ovaladas— lo que suele ocurrir es que los nervios que controlan la contracción del ano estén dañados. Esto puede estar provocado por cuestiones genéticas, traumas e, incluso, por la enfermedad del megacolon.

¿Cuántas horas puede estar un conejo sin hacer caca?

Como hemos explicado en más de una ocasión, el conejo tiene una digestión pasiva, lo que significa que debe alimentarse constantemente para poder expulsar el bolo alimenticio con los nuevos alimentos que procesa, ya que en caso contrario estos se quedarán obstaculizados en el intestino y ello puede ocasionar problemas de salud. Es por este motivo por el cual los conejos suelen defecar con bastante frecuencia, aunque en pequeñas cantidades. Por lo general, un conejo puede defecar entre 200 y 300 bolitas al día. Si tu conejo deja de defecar es porque está estreñido —lo notarás cuando deje de comer— y ello puede resultar crítico a partir de las 12 horas.

¿Por qué mi conejo cómo sus heces?

Como decíamos al principio, que un conejo coma sus propias heces es algo normal, de hecho observarás que tu mascota mete la cabeza entre sus patitas y que nunca llegues a ver su caca —en estos casos, claro está— porque lo hace directamente. El motivo de esta conducta tan extraña es debido a que necesita aprovechar al máximo la vitamina B y K, así como algunas proteínas, las cuales obtiene a través de su segunda digestión. Ahora bien, si tu amigo repite esta conducta con mucha frecuencia, entonces es posible que presente una carencia de algún nutriente. Nuestra recomendación es que revises su dieta y le proporciones alimentos ricos en todos los nutrientes que necesita tu mascota. Además, asegúrate de ofrecerle un heno de calidad especial para conejos. Por el contrario, si observas que no mejora y que su comportamiento sigue yendo a más, lo ideal es que visites un veterinario especializado que pueda diagnosticar el problema.